El Peje despilfarró su capital político en acciones que solo generaron el malestar generalizadoEl tiempo que se usa en el manejo de grupos de presión política se agota y eso lo sabe perfectamente Andrés Manuel López Obrador, el candidato izquierdista perdedor e el proceso electoral del pasado 2 de julio.Los momentos mas difíciles vendrá en estos días con el fin de no disminuir la atención sobre la “resistencia civil”.
Muchos no estaban a favor de El Peje, algunos otros lo tildaban de “loco” y otros más simplemente lo veían como a un “enemigo de México”. Sin embargo, ahora las cosas están cambiando y una buena parte de los mas de 14 millones de electores que votaron por el izquierdista, ahora lo ven como “el loquito del mercado”.
La presión que ejerció en días pasados, ahora se convierte en un factor de malestar de muchos mexicanos que estamos hartos de las “manifestaciones” públicas de un personaje que perdió unas elecciones y que no quiere reconocer su derrota.
Claro que tiene un grupo que lo sigue, pero ese grupo sigue siendo minoritario y no representa mayor problema para un país que millones, decenas de millones, no aceptan la manipulación mediática que pretende hacer López Obrador.
Si bien observamos una excelente estrategia mediática para atraer la atención de los mexicanos y de muchos medios de comunicación extranjeros, hoy las cosas han cambiado y se ve sólo a un envidioso e impotente que no logró sus objetivos.
Ya la tendencia de sus correligionarios estará cambiando y abandonarán poco a poco a Andrés Manuel, quien sabe perfectamente lo que ocurrirá.
Esto es lo que vendrá en poco tiempo y el único sentimiento político que queda es que El Peje despilfarró su capital político en acciones que solo generaron el malestar generalizado.El peor enemigo de Andrés Manuel López Obrador, se llama Andrés Manuel López Obrador.
POR VICTOR SANCHEZ BAÑOS
Archived Economia Latinoamericana
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